El imperio empresarial de Donald Trump podría enfrentarse a un destino crítico en las próximas horas. El juez Arthur Engoron tiene la capacidad de decidir sobre las sanciones en el caso de fraude civil contra el ex presidente y su compañía tan pronto como el viernes. La fiscal general de Nueva York, Letitia James, ha presentado una demanda en la que acusa a Trump de inflar el valor de sus propiedades y activos en miles de millones de dólares para obtener ventajas como mejores términos de préstamo o reducciones fiscales. La situación legal actual plantea un riesgo significativo no solo para la operatividad de The Trump Organization en Nueva York sino también para el control de sus propiedades y la posibilidad de adquirir nuevos préstamos en el estado durante cinco años.
El Caso Judicial Contra Trump
El proceso legal que enfrenta el exmandatario estadounidense y su empresa toma un giro decisivo con la posibilidad de que el juez Engoron emita un fallo sobre las sanciones solicitadas por la fiscal James. La demanda, que originalmente buscaba $250 millones en penalizaciones, ha aumentado su pretensión a $370 millones. Trump, conocido por su carrera en el sector inmobiliario y quien a menudo se jacta de su astucia comercial, ha negado cualquier acto ilícito y califica la acusación como una «caza de brujas» con motivaciones políticas.
Potenciales Consecuencias para Trump y su Organización
Las posibles penalidades que podrían recaer sobre Trump incluyen la prohibición de operar negocios en Nueva York, la posibilidad de que se le retire el control de sus propiedades y la restricción de solicitar nuevos préstamos en el estado por un periodo de cinco años. Estas medidas representarían un duro golpe para el imperio de Trump, poniendo en jaque su presencia y operaciones en uno de los mercados más importantes para su conglomerado.
Medidas de Control y Prevención de Fraudes
En respuesta a la estrategia legal de Trump, la oficina de la fiscal James solicitó y obtuvo la aprobación del juez para que se estableciera un monitor independiente. Este monitor se encargará de asegurar que The Trump Organization no realice transacciones de activos fuera de Nueva York sin la aprobación de la fiscalía o del tribunal. Además, la abogada de Trump, Alina Habba, ha asegurado que la empresa no tiene intención de realizar movimientos inapropiados de activos.
«Sin informar al juez o al fiscal general […] la Trump Org. no puede simplemente jugar al tres en raya y mover sus edificios o campos de golf o incluso su efectivo para que terminen en nuevas entidades comerciales fuera de Nueva York», publicó Lisa Rubin, abogada y analista legal.
Repercusiones a Largo Plazo y Posibles Apelaciones
A pesar de que una decisión adversa puede ser apelada, la analista legal Rubin aclara que un fallo negativo no se anularía incluso si Trump, quien actualmente es el favorito para la nominación presidencial republicana, gana las elecciones de noviembre. Además, resalta que Trump no puede simplemente trasladar sus compañías fuera de Nueva York para evadir un castigo potencial. En septiembre de 2022, coincidiendo con el anuncio de la demanda, se registró una nueva entidad con base en Delaware llamada Trump Organization II en el estado de Nueva York, lo que sugiere un intento de proteger activos ante posibles sanciones.