La decisión de Tesla de abrir su red de Superchargers a otros fabricantes de automóviles se revela como una estrategia comercial inteligente que impactará positivamente en la adopción de vehículos eléctricos (EV). La compañía liderada por Elon Musk, reconocida por su exclusiva red de carga, comenzará a vender membresías para uso de sus estaciones, con Ford siendo la primera en beneficiarse de este acceso. Se anticipa que la red de Superchargers de Tesla, que podría generar ingresos significativos, se convierta en un negocio multimillonario en la próxima década.
Supercharger de Tesla: De Perk a Negocio
Originalmente, la red de Superchargers de Tesla fue concebida como un incentivo exclusivo para sus clientes, proporcionando carga gratuita o a bajo coste. Sin embargo, con el crecimiento de la flota de vehículos de la marca, la empresa comenzó a cobrar por el uso de sus estaciones de carga. Al integrar a los propietarios de EV de Ford a su red, Tesla adopta un modelo de negocio diferenciado, cobrando a los usuarios de Ford un precio aproximadamente un 30% superior al de los propietarios de Tesla por el kWh de carga en promedio.
Membresías para la Red Supercharger
Tesla ofrece una solución a este costo adicional para los propietarios de vehículos de otras marcas: una membresía de Supercharging por $13 al mes. Esta membresía permite a los usuarios no Tesla pagar el mismo precio por kWh que los dueños de Tesla. Dada la popularidad y conveniencia de la red, se espera que esta opción sea beneficiosa para aquellos que usen los Superchargers más de una vez al mes.
Potencial de Ingresos para Tesla
Con más de 2.5 millones de vehículos eléctricos actualmente en las carreteras de EE.UU. y una proyección de superar los 10 millones para finales de la década, la apertura de la red Supercharger representa una fuente de ingresos potencialmente lucrativa para Tesla. Se estima que, solo en América del Norte, Tesla podría vender membrecías a cerca de 1 millón de EVs, lo que se traduciría en ingresos mensuales de $13 millones o $156 millones anuales. Además, se proyecta que para 2030, el negocio de la red Supercharger alcance un valor de $10 a $20 mil millones anuales.
“Como conductor de un vehículo no Tesla, espero usar la red de carga de Tesla solo si no hay otras opciones viables y menos costosas disponibles. Espero que las presiones del mercado libre obliguen a las otras redes a mejorar su juego para seguir siendo competitivas.
La estrategia de Tesla de monetizar su red de Superchargers mediante la venta de membresías y el cobro de tarifas premium a usuarios no Tesla, se alinea con la visión de la empresa de expandir la adopción de EVs y simultáneamente crear una nueva veta de ingresos significativos para la compañía.